Los dermatólogos son los encargados de identificar y tratar los trastornos que, por diversas razones se producen en la piel. Algunas de las patologías que se diagnostican con más frecuencia son los casos de acné, angiomas, lunares, verrugas y vitíligos, entre otros. No obstante, la compleja estructura de la piel, con millones de células, terminaciones nerviosas, glándulas y vasos sanguíneos, puede dar lugar a innumerables alteraciones.